Ahora puedes llorar y dejar que tu imagen se diluya
en los parabrisas de los coches estacionados a lo largo
del Paseo Marítimo. Pero no puedes perderte.
en los parabrisas de los coches estacionados a lo largo
del Paseo Marítimo. Pero no puedes perderte.
Roberto Bolaño.
No hay comentarios:
Publicar un comentario